Pocas veces en una prueba del WRC la primera etapa era tan pródiga en incidencias para pilotos y coches.Fueron muchos los equipos que han sufrido problemas mecánicos, pinchazos o incluso salidas de pista en las primeras ocho especiales del Rallye de Cerdeña, provocando muchas alteraciones en la clasificación general, casi a cada tramo, menos en la cabeza de la general donde Loeb se ha hecho con el poder.