Con un rallye compacto de cuatro tramos al que se darán dos pasadas, el Campeonato de España llega a un terreno completamente distinto al pisado hasta ahora. De la rapidez de las especiales de Alicante y en especial de Gran Canaria se pasa a la sinuosidad y al grip comprometido de las carreteras de Cantabria.

                        

La fragilidad de los Ford Fiesta R2 de la WRC Academy quedó definitivamente en evidencia en la segunda cita del campeonato, el rallye de Italia-Cerdeña. Ocho roturas de carter en la misma curva de la cuarta especial diezmaron el contingente de equipos participan en el nuevo certamen para jóvenes pilotos de la FIA. Entre las víctimas estuvo el Fiesta de José Antonio Suárez y Cándido Carrera, que se vieron obligados a abandonar tras haber podido disputar sólo tres tramos en su segunda participación mundialista de la temporada 2011.

                        

Copilotado por Daniel Elena, Loeb inició la primera especial del sábado con una ventaja de 33.2 segundos con su Citroën DS3 WRC. A pesar de tener que abrir pista y teniendo que barrer gran parte de la tierra de las especiales, Loeb ha sido capaz de minimizar la pérdida de tiempo durante todo el día.

Sebastien Loeb mantiene una cómoda ventaja al frente de la general en el Rallye de Cerdeña tras la disputa de los tres primeros tramos de esta mañana. Loeb ha vuelto a ser el primer piloto en salir a los tramos, por lo que se esperaba que tuviese grandes problemas a la hora de limpiar las especiales, pero el francés por el contrario, aumentó su ventaja al frente de la clasificación.

                        

Después de más de cinco meses sin competir, y estrenando coche en esta prueba, Sordo ha disputado una primera etapa del Rallye de Italia de menos a más, acoplándose y descubriendo el Mini John Cooper Works en carrera a medida que avanzaba el día.

                        

Pocas veces en una prueba del WRC la primera etapa era tan pródiga en incidencias para pilotos y coches.Fueron muchos los equipos que han sufrido problemas mecánicos, pinchazos o incluso salidas de pista en las primeras ocho especiales del Rallye de Cerdeña, provocando muchas alteraciones en la clasificación general, casi a cada tramo, menos en la cabeza de la general donde Loeb se ha hecho con el poder.