
Las calles pintorescas de la ciudad de Guanajato, donde parte de la especial discurre bajo tierra en los túneles que datan de la época en que la ciudad era el centro mundial de las minas de plata, ha sido testigo, como es habitual, del primer tramo del Rallye de México. Aunque los aficionados no han podido disfrutar de todos los participantes, ya que uno de los saltos artificiales ha resultado dañado, dejando con la miel en los labios a los espectadores, que se han quedado sin ver a Tänak, Ogier y Neuville.






