Llovera, que protagonizó un rallye muy regular, estuvo siempre en la lucha por la tercera plaza después que los dominadores de la categoría, Fores-Uson y Quijada-Canelo, se escaparan de manera definitiva en el primer paso por la especial más complicada de la jornada, la denominada Ponferrada de casi 19 kilómetros. Precisamente en el último paso por esta cronometrada se produjo el incidente que le costó el podio de Grupo N a Albert, así lo explicaba al llegar a la última asistencia del día: “hemos hecho toda la especial con el coche acelerado sin saber el porqué, una vez pasado el control horario me he dado cuenta que el velcro que sujetaba mi pierna derecha se había aflojado y el pie estaba sobre el pedal del gas...”. Albert cerraba este comentario encogiéndose de hombros, sin lugar a dudas se puede hablar de mala suerte en este final de rallye.
El equipo gallego Amador Vidal-Francis Lema fueron los ganadores del rallye, aunque no pudieron celebrarlo hasta minutos después de haber entrado su coche en el parque cerrado final. ¿El motivo? Volviendo al tramo de Ponferrada, en la primera pasada se produjo el vuelco del coche 0, los tres primeros coches que tomaron la salida llegaron a cruzar la línea de llegada mientras que Carlos Aldecoa al ser avisado por varias banderas amarillas en el recorrido decidió parar y a partir de aquí se neutralizó la especial.
Los comisarios deportivos tomaron su decisión después de terminar la prueba y al final Vidal-Lema fueron los primeros en el podio absoluto, seguidos de Del Cid-Odriozola y Macías-Portela.
Para Llovera-Vallejo la jornada no empezó demasiado bien, en el primer paso por Camponaraya (10,74 km) y Cubillos del Sil (14,74 km) se situaron a 36 segundos de Quijada-Canelo, los más rápidos en este inicio. La reacción en la segunda pasada fue espectacular, solo cedieron tres segundos a sus rivales que seguían al frente del GN. El piloto de Abarth no se explicaba la poca diferencia en el crono de las dos pasadas de sus rivales: “calcar el tiempo de las dos pasadas después del reconocimiento para mí es muy complicado. En el segundo paso por las especiales hemos mejorado, sobre todo en la segunda (Cubillos del Sil), en que hemos rebajado nuestro crono en más de dos segundos por kilómetro. De todas maneras, contentos de estar en la lucha por el podio, a ver qué pasa esta tarde”.
Las especiales de la continuación eran a priori mucho más complicadas y los pronósticos se confirmaron. Toral de los Vados (13,03 km) y Ponferrada (18,96 km) eran los obstáculos a superar y sobre todo esta última marcó el desarrollo de la prueba.
El tándem Llovera-Vallejo se mantuvo muy regular en la lucha por la tercera plaza del podio, una lucha que quedó reducida entre el piloto de Abarth y Oliver Martín, después de que Willy Villanueva quedara definitivamente fuera de la lucha al perder mucho tiempo en el segundo paso por Toral de los Vados. Llovera inició el definitivo paso por Ponferrada con dos segundos de ventaja sobre su rival pero el incidente mencionado le separó casi un minuto de su rival y en consecuencia tuvo que conformarse con una meritoria cuarta posición. A pesar de todo, Llovera dejó la localidad leonesa con buenas sensaciones. “Como se dice vulgarmente hemos estado en la pomada a pesar de que algunas especiales eran muy complicadas para nuestro estilo de pilotaje. Una pena no haber podido mantener el tercer puesto pero, sobre todo, después del abandono de Málaga, necesitábamos puntuar aquí para seguir sumando puntos de cara al campeonato”.
Los equipos habituales del Campeonato de España de Rallyes sobre tierra se van de vacaciones, Llovera no es una excepción, para volver con las pilas cargadas a Cervera el primer fin de semana de septiembre. Allí empezará la parte decisiva de la temporada.
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Alberto Novoa
