La última etapa del Rallye de Gran Bretaña significó algo más que el final de una nueva temporada del Mundial. Supuso la culminación de un ciclo, de una filosofía y de un concepto de coches.
Por poner el broche lucharon con intensidad dos pilotos que se han forjado un nombre en la era que ahora termina, Sébastien Loeb y Petter Solberg, los únicos Campeones del Mundo de los últimos ocho años. Ambos se vieron de nuevo las caras después de muchos años, y pelearon durante las dos últimas etapas como si se estuvieran jugando el honor en un rallye que siempre ha tenido algo de decisivo.
Solberg buscaba agónicamente volver a sentir la experiencia de subir a lo más alto del podio, cinco años después, en una prueba fetiche para él; luchaha por un triunfo que le facilitara la apertura de alguna puerta para el año que viene, y, al mismo tiempo, le sirviese para justificar, probablemente a sí mismo, el esfuerzo que ha estado haciendo estos dos últimos años. Pero enfrente se encontró con un rival perfeccionista, ganador infatigable que quería despedirse de su Citroën C4 WRC, el coche que le ha brindado más de la mitad de sus títulos, desde lo más alto del podio.
Cuando al alsaciano se le pone algo entre ceja y ceja es difícil pararle, y en la primera especial del domingo frenaba definitivamente la tentaviva de Solberg, que, una vez más, pagaba las exigencias de correr en un equipo privado. Así que, para cerrar en condiciones su séptimo entorchado, Loeb se subía al capó de su coche en una imagen repetida decenas de veces los últimos años, los de una generación que ha visto alimentar el palmarés de "Seb" hasta convertirse en el más completo de todos los tiempos.
Por detrás Latvala y Hirvonen peleaban por la tercera posición. En Gales Mikko se mostró más competitivo que en los últimos rallyes, y quiso demostrar, a sí mismo y a la concurrencia, que podía defenderse de los ataques de su compañero de equipo. El de Jyvaskyla lo logró, y, para dejar más patentes las estrategias de Malcolm Wilson, se paró deliberadamente en un charco del tramo de Margam Park, con poco disimulo, como si la historia de 1998 se repitiera salvando las distancias, para abrirle la puerta del subcampeonato a un Jari-Matti Latvala que esta temporada, además de inscribir su nombre en la lista de los Flying Finns, ha demostrado haber alcanzado ese punto de calma que necesita para poder ser Campeón. Por desgracia el final de temporada de Sordo ha sido un buen reflejo de su actuación de la temporada, y ahora deberá recurrir al management para no perder su silla en el Mundial.
CLASIFICACIÓN FINAL DEL RALLYE:
1º..Sebastien Loeb..........3h:14m:54,0s
2º..Petter Solberg............a.........19,1s
3º..Jari Matti Latvala.........a.....1m:35,3s
4º..Mikko Hirvonen..........a......1m:53,3s
5º..Daniel Sordo.............a.......2m:12,2s
CLASIFICACIÓN FINAL DEL CAMPEONATO:
1º..Sebastien Loeb................276 pts
2º..Jari Matti Latvala...............171 pts
3º..Petter Solberg..................169 pts
4º..Sebastien Ogier................167 pts
5º..Daniel Sordo.....................150 pts
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foto:rallygb.com
